Mejores prácticas de manejo de la anaplasmosis

La anaplasmosis es una enfermedad común en el ganado bovino con distribución mundial. La enfermedad se encuentra regularmente en el ganado bovino en el estado de Oklahoma. En consecuencia, la anaplasmosis ocurrirá todos los años en Oklahoma con alguna variación en la intensidad de esta enfermedad generalmente basada en la cepa de Anaplasma marginale, que es una bacteria que infecta los glóbulos rojos y una vez que un animal se infecta, queda infectado de por vida. La anaplasmosis se transmite a través de la picadura de garrapatas y moscas, así como de instrumentos contaminados con sangre, como agujas, herramientas para tatuar, equipos de castración e instrumentos para descornar. Esta bacteria no daña los glóbulos rojos directamente, pero la respuesta inmune de la vaca la reconoce cuando alcanza ciertos niveles, lo que luego causa anemia debido a que el sistema inmunológico mata los glóbulos rojos que están infectados. Esto limitará la cantidad de oxígeno que se transporta a través de la sangre del animal, lo que luego puede conducir a comportamientos agresivos exhibidos por vacas o toros normalmente dóciles. Otros signos clínicos de que los animales están infectados con la bacteria son letargo extremo, coloración amarillenta de las mucosas, abortos, pérdida de peso y dificultad para respirar. La mayoría de los productores no sabrán que tienen un problema de anaplasmosis hasta que vean vacas o toros muertos que tengan más de 2 años de edad. Esta enfermedad puede ser devastadora y las pérdidas por muerte en algunos rebaños se acercan al 50%.

Mejores prácticas de gestión para el tratamiento y la prevención

Primero, consulte con su veterinario para que pueda desarrollar un plan integral para limitar el impacto de la anaplasmosis. Esta relación es importante porque el plan de control más comúnmente utilizado es administrar antibióticos de tetraciclina a través de suplementos minerales o alimentos y el único acceso a este tratamiento preventivo es obtener una Directiva Veterinaria de Alimentos (VFD). Los signos clínicos de infecciones se pueden tratar con antibióticos inyectables mediante una inyección intramuscular de oxitetraciclina administrada durante varios días y debe administrarse bajo las instrucciones de un veterinario. Una terapia con antibióticos exitosa que cura los signos clínicos de infección da como resultado un animal portador. El ganado portador será inmune a más enfermedades derivadas de la anaplasmosis, pero seguirá siendo una fuente a través de la cual las agujas, moscas y garrapatas pueden propagar la enfermedad. Hay una vacuna disponible en algunos estados y Oklahoma está aprobada para esta vacuna. Esta vacuna no previene la infección, pero la evidencia anecdótica demuestra una reducción de los signos clínicos.

En Oklahoma no se trata de “si” sino más bien de “cuándo” la anaplasmosis afectará su rebaño de ganado. Las mejores prácticas de manejo para prevenir y controlar la transmisión de esta enfermedad incluyen:

• Alimentación con antibióticos de tetraciclina durante las temporadas de moscas y garrapatas (esencial)

• Rotar pastos (cuando sea posible) para evitar pastos con antecedentes de problemas de garrapatas durante la temporada de garrapatas

• Quemar pastos en primavera para controlar las garrapatas

• Controlar las poblaciones de moscas y garrapatas en la medida de lo posible

• Cambiar agujas y desinfectar cualquier instrumento que pueda resultar en la transmisión de sangre de un animal a otro cuando se trabaja con ganado.

El Dr. Mark Johnson y el Dr. Justin Talley analizan la prevención y el tratamiento de la anaplasmosis en vacas de carne en SunUpTV a partir del 31 de julio de 2021.https://www.youtube.com/watch?v=jTiU0lBSf84